Portada > Editorial

  Editorial
 
  Publicidad
 
  Visor de Artículos

15 septiembre 2006

¿En qué sociedad vivimos?

Últimamente se está comentándo mucho el requisito que ha establecido la pasarela Cibeles de Madrid para que las modelos desfilen este año en ella: pesarse y que la masa corporal llegue a 18. Bien, hasta aqui e incluyendo mi opinión personal, me parece razonable porque aunque en estas pasarelas no se buscan modelos de belleza sin igual, sino perchas andantes hay que tener en cuenta de la integriddad de la persona.
Se que estas preocupaciones en realidad no son por mantener la salud de las modelos sino por algo mas mezquino, evitar los escándalos como ya se han dado en otros casos. He aqui el dato curioso, el escándalo y " lo que ha dado que hablar" ha sido esta medida tomada, si no acertadamente si afortunadamente, por la pasarela Cibeles, siendo criticada por las demás pasarelas mundiales como la de Paris, Nueva York o Londres. Muchas de las top internacionales se han negado a pesarse y a participar en la pasarela por tener que pasar un casting en el que se tenia que tener en cuenta su peso. Sinceramente da que pensar ya que antes una modelo era capaz de cualquier cosa por tener la talla "perfecta" y el peso "perfecto" sin embargo, es curioso ver que quiza, no lleguen al peso establecido, es decir, lo completamente contrario a lo establecido anteriormente.
La delgadez extrema de las modelos es alarmante por eso se toman estas medidas (en principio), pero una vez desatado el escándalo, me parece más alarmante las declaraciones de determinados sectores de la moda. La negativa de las modelos a someterse a este condicionamiento es, no comprensible, aunque si de esperar, pero declaraciones como "En París esto nunca ha pasado. Son las empresas quienes deciden las tallas" de la semana de la moda de París, si me parecen alarmantes, nuevas generaciones de chicas están siendo claramente manipuladas por estas empresas, cosa que algunos dirán que ya sabemos, cierto, pero antes se presentaba como un cannon de belleza una delgadez, no extrema aunque si exagerada. Piensen si a estas empresas dejamos que sigan manipulando a jovenes que sueñan con ser modelos, si dejamos que conviertan a estas jovenes en perchas. Diganme que locuras y que requisitos van a tener que cumplir las modelos de las siguientes generaciones, una talla 34 y la masa muscular de 18 serán simples anéctotas porque tendrán que conseguir que la modelo se tenga en pie.
En fin, creo que la esclavitud por el cannon de belleza establecido, la delgadez hasta punto exagerados, no conduce a otra parte sino a una sociedad sin mentes, sino con cuerpos que en poco se degradarán y pudrirán. Así un día miraremos a nuestro lado y no tendremos otra cosa que antiguas promesas que ya no son nada, y eso si consiguen superar todo lo que han vivido.